Muestra los dientes

No es tan difícil

Imagínate que son 15 músculos, que se encuentran cerca de tu boca, que se arrugan cuando te ríes. Para muchos este dato no es nada nuevo, pero ¿si un gesto tan sencillo (y un movimiento casi imperceptible) no puede ser manifestado de manera más constante en nosotros?.

Tampoco quiero que se entienda que vamos a pasar con risa de hornado o de payaso todo el tiempo, porque hay momento para cada expresión, pero a lo que me refiero es que una sonrisa sincera puede:
Resolver algún problema. Darte una perspectiva positiva en tiempos difíciles. Serte como un remedio para el alma, reconforta. Ser la entrada de una gran amistad.

Como decía el escritor británico, William Shakespeare, es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada. Tal vez, si Romeo y Julieta habrían logrado que Capuletos y Montescos se mataran de la risa seguro el final no habría sido tan trágico para ambos.

Bueno, retomando la frase inicial, como lo dice Swami Sivananda, son necesarios cuarenta músculos para arrugar una frente, pero sólo quince para sonreír. ¿Ahora cuántos músculos quieres arrugar?. Piénsalo, y regálate el día que quieres.

Para norios:

Si eres de los que te quemas las pestañas haciendo las cosas, distribuye bien su tiempo y en algunas veces (puede ser en la mayoría de casos) son recompensados ya sea en notas, una felicitación verbal o escrita, bueno este artículo puede ser para ti.

Un consejo bastante grande: no de indignes en caso que se presente una “injusticia”, pues en realidad no siempre mereces ser el mejor en todo, pues no podemos ser perfectos y creernos unos capos en todo, reconoce que siempre hay alguien, en otra actividad, mejor que tú.

Nunca menosprecies el conocimiento, palabras o presencia de otra persona de cada ser que habita en este planeta, ya que de ella puedes obtener una enseñanza.

Es verdad que en algunas sociedades la ley del menor esfuerzo reina y que a veces te sientes más perdido que papa en ceviche pero no te rindas, dedícate a lo tuyo y no te fijes o te metas a criticar lo del resto; pero ojo: no por ello, consideres que tienes la verdad universal y que toda la sabiduría está depositada en ti. Cuando puedas, comparte tus conocimientos a quien lo necesita, no pongas el pie a nadie y disfruta también otras actividades; el mundo no está solamente entre cuadernos o un frente a un escritorio.

Entonces sigue así de dedicado y constante, aporta al mundo con tus brillantes ideas: la humildad es de GRANDES.